Rocas antiguas pueden confirmar la existencia de materia oscura
Los científicos utilizarán rocas antiguas de nuestro planeta como detectores subterráneos en busca de evidencia de materia oscura, buscando rastros de interacciones entre partículas de materia oscura y núcleos atómicos.
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La materia oscura, que constituye el 27% del universo, no interactúa con la materia ordinaria excepto a través de la gravedad. Sin embargo, los científicos pueden estimar su masa observando interacciones gravitacionales con las galaxias, lo que sugiere que puede ser responsable de la forma que presentan estas galaxias.
Aunque hay evidencia de materia oscura, aún no se ha logrado su detección directa, lo que lleva a algunos físicos a cuestionar su existencia. Sin embargo, surgen propuestas intrigantes para una confirmación más definitiva: la búsqueda de partículas de materia oscura que colisionan con núcleos atómicos.
Si se producen estas colisiones, incluso en raras ocasiones, se puede producir una cierta cantidad de energía detectable, lo que proporciona a los científicos pruebas tangibles de la existencia de materia oscura en el universo. Los investigadores de Virginia Tech están construyendo un nuevo laboratorio para investigar cómo las rocas antiguas pueden ayudar en esta tarea.
El equipo cree que la materia oscura puede haber interactuado con la Tierra a lo largo de sus 4.600 millones de años de historia y está explorando la posibilidad de utilizar rocas antiguas de nuestro planeta como detectores subterráneos para encontrar evidencia de estas hipotéticas colisiones.
Esta idea se propuso en la década de 1980, pero recién ahora los avances tecnológicos parecen estar listos para brindar a los investigadores la oportunidad de probarla. El equipo está utilizando técnicas avanzadas de obtención de imágenes para buscar rastros de antiguas interacciones de materia oscura en las estructuras cristalinas de las rocas.
Cuando una partícula de alta energía choca con un núcleo en una roca, el impacto puede desplazar ese núcleo, creando cambios estructurales en el cristal. La idea es analizar cristales expuestos a diversas partículas durante largos períodos y restar las distribuciones conocidas, con la esperanza de identificar diferentes sucesos que puedan estar relacionados con la materia oscura.
Habrá mucho trabajo de preparación para este experimento, como identificar los tipos de minerales adecuados como detectores de materia oscura. Los científicos utilizarán tecnología de imágenes microbiológicas para obtener imágenes de pistas de partículas de alta energía en fluoruro de litio sintético.
Fuente: Virginia Tech
