La NASA descubre la causa del patrón repetido enviado por la Voyager 1
Los ingenieros de la NASA han descubierto la fuente del misterioso fallo de la Voyager 1, que la dejó enviando un patrón repetitivo de unos y ceros en lugar de datos útiles.
La Voyager 1 ha viajado más lejos que cualquier objeto creado por el hombre, cruzando la heliopausa y dirigiéndose al espacio interestelar. Mientras hacía esto, continuó enviando datos útiles a la Tierra, ayudándonos a aprender sobre el espacio entre estrellas fuera de nuestro propio Sistema Solar. Todo esto mientras trabaja con sólo 69,63 kilobytes de memoria y se ejecuta en parte con código escrito originalmente en el arcaico lenguaje informático Fortran 5.
«El botón que presionas para abrir la puerta de tu automóvil tiene más potencia de cálculo que las naves espaciales Voyager», explicó la directora del proyecto Voyager, Suzanne Dodd, a NPR. «Es notable que sigan volando y que hayan volado durante más de 46 años».
Con una misión de este tipo, es de esperar algún desafío ocasional, incluso antes de tener en cuenta el entorno de alta radiación por el que se dirige.
“En septiembre de 2023, surgió un problema con los datos que regresaban de la Voyager 1. Normalmente transmitidos en código binario, o una serie de 0 y 1 que representan palabras, la sonda en cambio solo enviaba 1 y 0 alternos. Efectivamente, la llamada entre la nave espacial y la Tierra todavía estaba conectada, pero la ‘voz’ de la Voyager fue reemplazada por un tono de marcado monótono”, explicó el equipo de ingeniería de la Voyager de la NASA a IFLScience en febrero.
“Debido a este problema, los científicos no reciben ningún dato científico ni actualizaciones sobre la salud y el estado de la sonda, incluida información que pueda revelar el origen del problema. A través de varios medios indirectos, el equipo ha llegado a la conclusión de que lo más probable es que el problema esté relacionado con el sistema de datos de vuelo. [FDS], una de las computadoras a bordo de la sonda. El equipo está trabajando arduamente para resolver el problema, pero este proceso puede llevar meses”.
En marzo, la NASA envió un comando «empujar» a la Voyager 1, instándola a enviar una lectura de la memoria FDS, así como otras variables en el software. A partir de esto, descubrieron que alrededor del 3 por ciento de su memoria se había corrompido, probablemente como resultado de que un solo chip de la sonda dejó de funcionar.
«Los ingenieros no pueden determinar con certeza qué causó el problema», explicó la NASA en un comunicado. «Hay dos posibilidades: que el chip haya sido golpeado por una partícula energética procedente del espacio o que simplemente se haya desgastado después de 46 años».
El equipo se enfrenta a la presión del tiempo, ya que el sistema propulsado por plutonio que impulsa la nave se está quedando sin energía. En unos pocos años, es posible que tengan que apagar los instrumentos científicos uno por uno para que sigan funcionando.
Sin embargo, el equipo es optimista de que podrán solucionar el problema en las próximas semanas y meses, lo que permitirá que la sonda envíe datos científicos útiles una vez más.