“Vi un OVNI estrellarse contra el suelo. Todavía tengo un trozo del accidente para demostrarlo”
Un hombre de Los Ángeles insiste en que vio extraterrestres huyendo de un OVNI después de que se estrellara en un desierto de Nuevo México e incluso tomó una pieza de la misteriosa nave como prueba del encuentro.
José Padilla creció en San Antonio, y tenía sólo nueve años cuando afirma haber descubierto la nave extraterrestre «con forma de aguacate» allí con un amigo de la infancia.
Según su relato, los dos muchachos se encontraban a caballo a 21 kilómetros del lugar de pruebas nucleares de Trinity, donde Estados Unidos detonó la primera bomba nuclear en 1945.
Fue en ese año que ocurrió el supuesto encuentro, y en un principio Padilla asumió que el sonido que acompañó al «choque» era una prueba de bomba.
«Le dije a mi amigo, ‘debe ser otra prueba de la bomba’ y él dijo, ‘no, no es una bomba, mira el humo que sale del suelo'», dijo Padilla a CBS News Los Ángeles.
Padilla afirma que cuando investigaron qué había causado el sonido en el rancho de su padre, parecía que salía humo de un avión estrellado. Padilla dijo que entonces aparecieron tres extraterrestres y comenzaron a «contonearse y correr en círculos».
Pero el señor Padilla dice que no tenía miedo y creía que las criaturas «necesitaban ayuda».
Afirma que los militares limpiaron los escombros durante los siguientes diez días y advirtieron a los muchachos que se mantuvieran alejados, pero ellos observaron desde una cresta cercana escondida detrás de cactus.
El señor Padilla dice que él y sus amigos aprovecharon la oportunidad cuando los soldados estaban en un descanso y entraron en la aeronave. La aeronave estaba vacía y él decidió quitar un pequeño «dial» de la pared y esconderlo en el garaje de su familia.
El extraño artefacto fue examinado por Frontier Analysis, un laboratorio de pruebas químicas con sede en Ohio, en 2015 y dijo en su informe que estaba hecho de aluminio mezclado con silicio y cobre, una mezcla común en las piezas de los motores, y que las proporciones isotópicas eran terrestres.
Pero la firma agregó que podrían descartar que los metales tengan una fuente extraterrestre, informa CBS News Los Ángeles.
Hasta el día de hoy, Padilla insiste en que «nadie sabe qué es». En los años intermedios, se mudó a Rowland Heights, una zona no incorporada de Los Ángeles, California, donde formó una familia, pero se aferró al misterioso souvenir.
La periodista de investigación e investigadora de ovnis Paola Harris lo entrevistó a él y al amigo que también afirma haber presenciado la nave extraterrestre en 2012.
Esto ocurrió mientras estaba investigando una afirmación presentada por el hijo del piloto del ejército de la Segunda Guerra Mundial, William Brophy, quien dijo que una de las últimas misiones de su padre fue sobrevolar el área donde se dice que tuvo lugar el accidente.
Harris dijo al medio que durante uno de estos vuelos, el padre de Brophy había visto a dos niños pequeños a caballo, quienes ella cree que eran el joven Padilla y su amigo.