Mujeres encantadoras de la Odisea: desde sirenas seductoras hasta brujas malvadas

De los monstruos y criaturas mitológicas con las que se topa Odiseo durante su largo viaje de Troya a Ítaca, entre los más feroces se encuentran las mujeres. Tres de ellas son Circe, las sirenas y Calipso, que resultan ser obstáculos difíciles y aterradores para el viaje de regreso de Odiseo.

La bruja Circe

Después de escapar de la isla de los lestrigones caníbales, Odiseo y su tripulación se topan con Eea y el hogar de Circe, a quien se hace referencia como bruja y ninfa. Tiene un vasto conocimiento de pociones y hierbas, que Odiseo y su tripulación experimentaron de primera mano.

Odiseo y la mitad de su tripulación se quedan en los barcos mientras los demás van en busca de Eea para ver qué gente vive allí. El grupo de búsqueda llega a la casa de Circe, que se describe como una casa grande en un claro en medio de un espeso bosque. Alrededor de la casa hay leones y lobos, que al principio asustan a la tripulación… hasta que notan lo dóciles que son las bestias. Más tarde se descubre que se trata de las víctimas previamente drogadas de Circe y sus pociones.

En su casa Circe recibe a la tripulación de Odiseo como invitados, alimentándolos con una comida de queso y miel que ella ha drogado, convirtiendo a la tripulación en cerdos.

• Femme Fatale: Las antiguas artes sexuales de las mujeres más atractivas de la historia
• ¿Encontrada la cueva de la seductora depravada de la Odisea de Homero?

Pintura de Circe seduciendo a Odiseo 1786. (Mzilikazi1939 / Dominio público)

Todos los miembros de la tripulación, menos uno, se transforman en cerdos, y este logra escapar para advertir a Odiseo y a la otra mitad de la tripulación de lo que ha sucedido. Odiseo se aventura a la casa de Circe para salvar a sus hombres, pero el dios Hermes, enviado por Atenea, lo detiene en el camino. Hermes le cuenta a Odiseo sobre una hierba llamada molibdeno que lo protegerá de las pociones de Circe. Inmune a sus pociones, Odiseo actúa como si fuera a atacarla. Después, ella intenta convencer a Odiseo de que se acueste con ella, lo que él evita, debido al consejo de Hermes. Después de todo esto, Odiseo convence a Circe para que convierta a su tripulación en humanos y los libere.

• La fascinante historia de Circe, diosa de la magia en la mitología griega
• En busca del paradero perdido de la isla de Circe, la hechicera de Odiseo

Las sirenas

Odiseo también se encuentra con las famosas sirenas durante sus peregrinajes. En las representaciones griegas, las sirenas son criaturas mitad mujer mitad pájaro que se posan en las rocas junto al mar y cantan hermosas canciones que atraen a los hombres que, negándose a irse, mueren de hambre.

En la Odisea, Circe advierte a Odiseo sobre las sirenas y le dice que se tape los oídos a él y a su tripulación con cera de abejas para evitar que sus dulces canciones entren en sus oídos. Sintiendo curiosidad por las canciones que cantan las sirenas, Odiseo se limita a tapar los oídos de su tripulación con cera de abejas y luego hace que sus hombres lo aten al mástil del barco, ordenándoles que no lo desaten… por mucho que él lo suplique. Odiseo escucha la canción, ruega y ruega a su tripulación que lo libere, pero su fiel tripulación solo aprieta aún más las cuerdas, atándolo al mástil.

Odiseo y las sirenas – pintura de 1891. (Obra de arte / Dominio público)

Luego se revela que la razón por la que las canciones atraen y seducen a los hombres es porque cantan verdades pasadas y futuras. Cantan a Odiseo sobre sus esfuerzos pasados, como la gloria y el sufrimiento que soportó en los campos de batalla de Troya, y sus acciones futuras y lo que logrará… y prometen falsamente que sus oyentes vivirán para contar estas verdades a los demás. Odiseo, por supuesto, lo logra y así es como podemos obtener este relato de él.

La ninfa Calipso

Al final de sus peregrinajes, Odiseo llega solo a la isla de Ogigia, la ombligoque significa ombligo o centro del mar, y también el hogar de la ninfa Calipso. Homero describe a Calipso como la hija del titán Atlas, que sostiene los pilares del cielo y el mar. En la epopeya de Homero, Calipso mantiene a Odiseo en su isla durante siete años, lo que representa una gran parte de su viaje de regreso a casa. Calipso desea convertir a Odiseo en su esposo inmortal y lo encanta con su canto mientras teje en su telar. Odiseo realiza todos los deberes de un esposo para Calipso, incluido acostarse con ella.

Calipso recibiendo a Telémaco y Mentor en la Gruta. (Dominio público)

Incluso bajo el hechizo de Calipso, Odiseo desea una vida diferente. La promesa de la inmortalidad no le impide extrañar a su esposa, Penélope. Odiseo, un hombre, no desea la vida de un dios; prefiere mucho más la vida de un mortal, incluso con todas sus dificultades que claramente faltan en la isla de Calipso. Al notar que Odiseo quiere abandonar la isla, Atenea le pide a Zeus que ordene la liberación de Odiseo. Zeus envía a Hermes para que le diga a Calipso que libere a Odiseo porque de todos modos no es su destino permanecer en la isla para siempre. Finalmente, Calipso, y obstinadamente, acepta liberar a Odiseo y lo envía de regreso con vino, pan y materiales para una balsa.

Mujeres seductoras de la antigua Grecia

Estas mujeres, aunque no necesariamente tienen un aspecto aterrador, sin duda son aterradoras por su capacidad para hechizar a los hombres mortales. Con mucha ayuda, Odiseo es capaz de resistir o liberarse de estos encantamientos. Incluso la mujer aparentemente menos amenazante de las tres, Calipso, logra mantener a Odiseo retenido durante siete años, lo que demuestra ser uno de los mayores obstáculos en su viaje.

Incluso bajo el hechizo de Calipso, Odiseo desea una vida diferente. La promesa de la inmortalidad no le impide extrañar a su esposa, Penélope. Odiseo, un hombre, no desea la vida de un dios; prefiere mucho más la vida de un mortal, incluso con todas sus dificultades que claramente faltan en la isla de Calipso. Al notar que Odiseo quiere abandonar la isla, Atenea le pide a Zeus que ordene la liberación de Odiseo. Zeus envía a Hermes para que le diga a Calipso que libere a Odiseo porque de todos modos no es su destino que permanezca en la isla para siempre. Finalmente, Calipso, y obstinadamente, acepta liberar a Odiseo y lo envía de regreso con vino, pan y materiales para una balsa.

Telémaco y las ninfas de Calipso (Angelica Kauffmann/CC0)

Claramente, las mujeres son vistas como encantadoras y engañadoras de los hombres, distrayéndolos de su curso o propósito previsto… y esto refleja un sentimiento que se encontraba en la Antigua Grecia de que las mujeres eran criaturas engañosas que no podían controlar sus deseos sexuales y buscaban atrapar a los hombres. Esto se vuelve especialmente claro cuando se compara con los monstruos masculinos, como el cíclope Polifemo, que no tiene la naturaleza encantadora y engañosa de estas mujeres. Odiseo ve inmediatamente a través de su engaño y es capaz de ganar contra Polifemo con su propio engaño. Mientras que Odiseo puede detectar este engaño por sí mismo, cuando se trata de monstruos femeninos y diosas, necesita la ayuda de los dioses y otros para advertirle y ayudarlo a liberarse.

Imagen superior: Dos sirenas. Fuente: Aarrttuurr /Adobe Stock

Por Julie Huse

Classical Wisdom Limited es una editorial en línea que se esfuerza por promover y preservar los clásicos de la antigua Grecia y Roma. Nuestro objetivo es acercar la sabiduría antigua a las mentes modernas. Puede visitar nuestro sitio web aquí: http://sabiduríaclásica.com