Japón se convierte en el quinto país en aterrizar con éxito en la Luna
Hoy, 19 de enero, a las 3:20 pm UTC, la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA) ha hecho historia, no sólo para Japón, sino para el mundo entero. Su módulo de aterrizaje inteligente para investigar la Luna (SLIM) logró un alunizaje suave en la Luna. El objetivo era poder hacerlo a sólo 100 metros (330 pies) de un área objetivo específica. Nunca antes los humanos habían intentado alcanzar tanta precisión al aterrizar una nave espacial en otro mundo. Parece que lo logró, pero se espera la confirmación de la precisión la próxima semana.
Con SLIM, Japón se convierte en la quinta nación en aterrizar suavemente en la Luna y la tercera en este siglo. Otros dos países asiáticos –China e India– también lograron una hazaña no tan fácil, uniéndose al éxito anterior de Estados Unidos y la ex Unión Soviética de los años 1960 y 1970.
SLIM es una demostración de tecnología para aterrizajes de alta precisión. Utilizó observaciones de otra misión JAXA, SELENE (también conocida como Kaguya), para saber con precisión dónde estaba en la superficie de la Luna y moverse con precisión hacia el área objetivo. En comparación, el lugar de aterrizaje esperado para el Apolo 11 era una elipse de 20 kilómetros por 5 kilómetros (12 por 3,1 millas). Lograr aterrizar “donde queremos” en lugar de “donde podemos” es una hazaña verdaderamente increíble.
Sin embargo, no todo ha salido a la perfección. Después de una conferencia de prensa muy esperada, JAXA confirmó que las células solares de SLIM no se están cargando ni generando electricidad, por lo que actualmente solo está usando sus baterías. Si SLIM no puede cargarse, su vida útil podría ser de sólo unas pocas horas. Existe la posibilidad de que cuando cambie la dirección del Sol golpee las células solares y estas puedan empezar a cargarse, pero por ahora JAXA ha apagado parte de la nave para ahorrar energía y está priorizando la descarga de los datos del aterrizaje y las fotografías tomadas. Aún así, la misión ya ha logrado mucho, incluido el aterrizaje de precisión y la liberación de sus dos rovers, que se comunican con la Tierra.
Ambos rovers tienen algunos diseños experimentales interesantes: el primero se moverá mediante un mecanismo de salto y está equipado con cámaras y algunas cargas útiles científicas. El segundo, un rover extremadamente liviano que pesa sólo 250 gramos (9 onzas), es un cambiaformas que puede cambiar de forma para adaptarse mejor a las diversas condiciones que pueda encontrar en la superficie de la Luna.
A pesar de los alunizajes humanos y de las diversas misiones soviéticas de décadas pasadas, alcanzar y aterrizar en nuestro satélite natural está plagado de complicaciones, y no estamos hablando sólo de la precisión alcanzada por SLIM en la actualidad. Japón ya ha fracasado antes. En noviembre de 2022, el módulo de aterrizaje OMOTENASHI de JAXA se perdió antes de llegar a la Luna, mientras que en abril de 2023 sufrió un destino similar una startup japonesa que intentaba convertirse en la primera empresa privada en aterrizar en la Luna.
En agosto del año pasado, Rusia intentó su prometido regreso a la Luna. Esto también terminó mal, con la nave espacial estrellándose en la superficie, creando un nuevo cráter que fue fotografiado por la NASA. Precisamente ayer, la misión privada estadounidense Peregrine One tampoco logró llegar a la Luna, sino que se quemó al caer de nuevo a la atmósfera terrestre.
Con muchas más misiones a la Luna programadas para este año, el éxito no está garantizado, incluso 50 años después de que los humanos caminaran sobre la superficie lunar. Por ahora, Japón ha logrado hoy un hito importante, lo que nos lleva un paso más adelante en la exploración de la Luna. Este porslim momento en la carrera espacial, destaca la importancia de la innovación y la precisión en los alunizajes modernos.