Neftis, diosa egipcia de la noche y protectora de los muertos

Neftis, una de las deidades más misteriosas y esquivas del antiguo panteón egipcio, era conocida como la diosa sombría de la noche, de la muerte y la decadencia. Era la hermana oscura de Isis, esposa de Set, madre de Anubis y miembro de la Gran Enéada de los nueve dioses, los primeros, los que reinaban supremos. Como muchas diosas, poseía una belleza sobrenatural, que a menudo se mostraba con alas majestuosas, que simbolizaban su relación con el halcón o el milano y su naturaleza protectora.

Su verdadero nombre era Nebthwt, representado en la corona que llevaba sobre la cabeza, la casa y la cesta. Estos símbolos jeroglíficos se traducen como “Señora de la Casa” o, más apropiadamente, “Señora del Templo”. Como tal, su imagen se puede encontrar en lugares sagrados, tallada en los pilonos que protegen el santuario interior. También era la protectora del cuerpo, retratada junto con su hermana en tumbas y sarcófagos. Juntas, a menudo se las representaba como guardianas de la cabeza y los pies, de pie en cada extremo de un féretro funerario. Como opuestos complementarios, ambas aseguraban que se llorara a los muertos y que su vida después de la muerte fuera exitosa.

Un drama familiar cautivador

Como diosa de cuarta generación, Neftis nació del cielo, Nut, y de la tierra, Geb. Junto a ella estaban Osiris, Seth, Isis y el anciano Horus. Osiris gobernó Egipto con su esposa, Isis, y en perfecta oposición, Seth se casó con Neftis. Sin embargo, no fue un matrimonio ideal. Después de todo, Seth era el dios del caos y las tormentas, cuyas acciones irreflexivas causan daños irreparables. Presumiblemente, su matrimonio nunca se consumó, ya que Plutarco se refiere a la esposa de Tifón (Seth) como «una imitación de mujer», estéril e infértil como el desierto.

Un sudario pintado que muestra a Neftis. Museo Metropolitano de Arte. (Keith Schengili-Roberts / CC BY-SA 2.5)

Sin embargo, Neftis logró encontrar el cariño y la adoración de su hermana, Isis, y de Osiris. Las tres vivían juntas y tenían un vínculo extraordinariamente estrecho. Sin embargo, ese vínculo finalmente se pondría a prueba cuando Neftis actuó impulsada por un deseo tonto. Según cuenta la historia, había emborrachado a Osiris y lo había seducido. Dado que las hermanas tenían un parecido sorprendente, su estado de ebriedad lo llevó a creer que se estaba acostando con su esposa. Isis estaba devastada y, para empeorar las cosas, Neftis se quedó embarazada.

Por Jessica Nadeau

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