Los científicos detectan los rayos cósmicos más energéticos conocidos
Parece que el Los rayos cósmicos más energéticos jamás detectados Procedían de algún lugar cercano a la Tierra (en términos astronómicos, por supuesto). Compuestos de electrones y positrones, los rayos fueron identificados por el observatorio del Sistema Estereoscópico de Alta Energía (HESS) en Namibia y son 40.000 veces más energéticos que la luz visible.
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“Este es un resultado importante, ya que podemos concluir que el CRe [elétrons de raios cósmicos] mesurado probablemente provienen de muy pocas fuentes en las proximidades de nuestro propio Sistema Solar, hasta 1.000 años luz de nosotros, una distancia muy pequeña en comparación con el tamaño de nuestra galaxia”, dijo Kathrin Egberts, autora correspondiente del nuevo estudio.
Los rayos cósmicos son partículas altamente energéticas que provienen del Sol, explosiones de supernovas y otras fuentes. Cuando estos rayos alcanzan la atmósfera superior de la Tierra, forman lluvias de partículas que pueden detectarse en la superficie, pero reconstruir los rayos que crearon dichas lluvias no es una tarea fácil.
Los rayos en cuestión fueron detectados por el observatorio HESS, compuesto por cinco telescopios. Mientras viajan por el espacio, losLos rayos interactúan con la luz y los campos magnéticos, perdiendo energía. Por tanto, para ser detectados, es necesario que estén relativamente cerca de nosotros.
Los telescopios han pasado más de una década escaneando la atmósfera superior en buscar signos de radiación dejada por los rayos. Para entenderlo, imaginemos un avión supersónico: estos vehículos se mueven más rápido que la velocidad del sonido y provocan una explosión, y de manera similar, las partículas de estos rayos viajan más rápido que la luz en un medio que las frena, emitiendo un brillo azulado.
Luego, los investigadores analizaron el brillo y utilizaron algoritmos sofisticados para eliminar cualquier ruido de los datos. Al final del trabajo, crearon un espectro de energía extremadamente detallado de los rayos que inciden en nuestro planeta.
La cantidad de rayos disminuye en escalas más energéticas, lo que hace que sean difíciles de detectar con instrumentos espaciales más pequeños. Por otro lado, la presencia de partículas más energéticas parece ser una buena señal de que, de hecho, Algunas de las fuentes que emiten estos rayos están cerca de la Tierra. – Cualesquiera que sean esas fuentes.
El artículo con los resultados del estudio fue publicado en la revista Physical Review Letters.
Fuente: Eurekalert