SpaceX suministra el cohete Starship y prepara la tercera prueba de vuelo

El cohete Starship de SpaceX acaba de pasar una prueba de reabastecimiento de combustible. El lunes (4), los prototipos del propulsor Super Heavy y Starship, la propia nave espacial, recibieron metano líquido y oxígeno, como parte de la preparación para la próxima prueba de vuelo.

El suministro de propulsor forma parte de una especie de ensayo para el lanzamiento, por lo que también hubo una cuenta atrás casi completa. «El vuelo 3 de Starship se está preparando para suceder», escribió Elon Musk, director ejecutivo de SpaceX, en una publicación en X/Twitter.

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Juntos, Starship y Super Heavy alcanzan los 120 m de altura, formando el cohete más alto del mundo; en comparación, el cohete Saturn V, utilizado en las misiones del programa Apollo, medía 110 m de altura.

Starship es la apuesta de la NASA para llevar astronautas a la superficie de la Luna en 2026, a través de una versión modificada. Pero antes de eso, SpaceX necesita lanzar con éxito su cohete al menos una vez en una prueba de vuelo casi orbital.

Hasta la fecha se han realizado pruebas de vuelo con Starship en abril y noviembre de 2023. En el primero de ellos, el vehículo sufrió una detonación controlada unos cuatro minutos después de abandonar la plataforma. En el segundo, sus etapas explotaron tras separarse.

Musk sugirió en una entrevista que la tercera prueba podría tener lugar a principios de marzo, pero para llevarla a cabo SpaceX necesita una licencia otorgada por la Administración Federal de Aviación (FAA). Por ahora, la agencia todavía está investigando el resultado de la segunda prueba de vuelo, por lo que no es posible saber exactamente cuándo se realizará el próximo vuelo de Starship.