Lo más destacado de la NASA: el exoplaneta infernal es la foto astronómica del día
La fotografía destacada por la NASA este viernes (3) muestra cómo el exoplaneta WASP-43b, del tamaño de Júpiter, no es nada hospitalario. ¿El motivo? Allí las temperaturas van desde los infernales 1.000 ºC.
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El exoplaneta WASP-43b está a unos dos millones de kilómetros de su estrella; a modo de comparación, consideremos que la distancia media entre la Tierra y el Sol es de 150 millones de kilómetros.
Este mundo tiene lo que se llama bloqueo de mareas en relación con su estrella, lo que significa que siempre mantiene el mismo lado mirando hacia él, como nuestra Luna. La cara diurna del planeta alcanza unos impresionantes 1.371 ºC, calor suficiente para forjar hierro. La cara nocturna, a su vez, es un poco más refrescante, alcanzando “sólo” los 537 ºC.
Nuevas observaciones realizadas con el telescopio James Webb muestran que allí soplan fuertes vientos ecuatoriales que ayudan a hacer circular los gases atmosféricos. Así, migran del lado del día al lado de la noche y sólo entonces se enfrían.
El espectro de luz infrarroja observado por el telescopio sugiere que el exoplaneta tiene vapor de agua tanto en su lado nocturno como en el diurno. La detección podría ayudar a los científicos a comprender mejor la composición de las nubes allí.
Descubre el exoplaneta WASP-43 b
El exoplaneta WASP-43 b es del tipo Júpiter caliente. Por tanto, es similar en tamaño al planeta más grande del Sistema Solar y está formado principalmente por hidrógeno y helio. Como sugiere el nombre, es mucho más caliente que cualquier mundo de nuestro vecindario espacial.
Este mundo fue descubierto en 2011 y desde entonces ha sido observado por telescopios espaciales como el Hubble, Spitzer y James Webb. Aunque es un planeta pequeño y demasiado cerca de su estrella para observaciones directas con telescopios, su corto período orbital favorece la llamada espectroscopia de curva de fase.
Básicamente, se trata de una técnica que consiste en medir pequeños cambios en el sistema formado por el planeta y su estrella a medida que viaja a su alrededor. Como la luz infrarroja emitida por un objeto depende de su temperatura, los datos de brillo obtenidos por Webb podrían revelar la magnitud del calor allí.
Una característica curiosa del exoplaneta es que la Unión Astronómica Internacional aprobó un nuevo nombre para él: ahora, este mundo se llama Astrolábos, y su estrella, Gnomon. Los nombres son referencias a instrumentos astronómicos griegos.
Fuente: APOD
