Brasileño encuentra par de agujeros negros supermasivos
Los telescopios de la NASA acaban de revelar el par de agujeros negros supermasivos más cercanos jamás observados. Los datos de Hubble y Chandra mostraron que los objetos están separados por sólo 300 años luz y que están incrustados en un par de galaxias, alimentados por gas y polvo mientras brillan como núcleos galácticos activos (o AGN).
- Haz clic y sigue a Canaltech en WhatsApp
- Mira cómo sería caer en un agujero negro con vídeo de la NASA
Los dos agujeros negros supermasivos estaban en el núcleo de sus respectivas galaxias, pero comenzaron a fusionarse y acercarlos. Por lo tanto, seguirán acercándose en espiral hasta terminar fusionados en, quién sabe, 100 millones de años. Cuando esto suceda, provocarán poderosas ondas gravitacionales que distorsionarán brevemente el tejido del espacio-tiempo.
El par de AGN en cuestión es el más cercano jamás detectado en el universo local en observaciones de rayos X y luz visible. Por supuesto, se han encontrado otros agujeros negros muy juntos antes, pero todos estaban separados por distancias mucho mayores que las observadas ahora en la galaxia MCG-03-34-64.
El descubrimiento fue una sorpresa para los autores, quienes notaron que las imágenes de alta resolución del Hubble revelaron tres picos de difracción (artefactos que surgen cuando la luz de una pequeña región en el espacio es distorsionada por el espejo del telescopio) en la galaxia.
Esto indica que había mucho gas concentrado en un área pequeña. “Esta visión no es común en el universo cercano y nos mostró que algo más estaba sucediendo dentro de la galaxia”, comentó Anna Trindade Falcão, autora que dirigió el estudio. Es licenciada en Física por la Universidad Federal de Minas Gerais y actualmente trabaja en el Centro de Astrofísica Harvard & Smithsonian en Cambridge.
Intrigados, los investigadores decidieron analizar nuevamente la galaxia, pero en rayos X, con el telescopio Chandra. “Cuando observamos MCG-03-34-64 en la banda de rayos X, vimos dos poderosas fuentes separadas de emisión de alta energía que coincidían con los brillantes puntos ópticos de luz vistos por el Hubble. Conectamos los puntos y concluimos que probablemente estábamos observando dos agujeros negros supermasivos muy juntos”, describió.
Utilizando datos archivados del observatorio Karl G. Jansky Very Large Array, se dieron cuenta de que el par de agujeros negros emiten fuertes ondas de radio. “Cuando se ve una luz brillante en luz visible, rayos X y longitudes de onda de radio, se pueden descartar muchas cosas, lo que lleva a la conclusión de que estas emisiones sólo pueden explicarse por agujeros negros cercanos”, concluyó.
Sin embargo, la tercera fuente de luz observada por el Hubble sigue siendo un misterio. Se necesitan más datos para confirmar su naturaleza, pero por ahora los investigadores sospechan que puede ser gas que fue impactado por la energía del chorro disparado por uno de los agujeros negros.
El artículo con los resultados del estudio fue publicado en la revista. La revista astrofísica.
Fuente: The Astrophysical Journal, NASA