Algunas similitudes entre diferentes civilizaciones antiguas
Llama poderosamente la atención la cantidad de similitudes entre varias civilizaciones antiguas, separadas entre sí por miles de años y miles de kilómetros, pero que comparten una gran cantidad de aspectos religiosos como edilicios, por ejemplo entre los Mayas y los Egipcios.
Explorar las similitudes entre culturas antiguas nos lleva a descubrir conexiones sorprendentes y plantea preguntas intrigantes sobre el desarrollo independiente o la posible interacción entre estas sociedades distantes. México y Egipto, por ejemplo, se encuentran situados en la misma longitud de la Tierra, sobre el Trópico de Cáncer. Entre la pirámide de Saqqara en Egipto y las del Sol y la Luna de Teotihuacán en México, existen similitudes geométricas, estéticas y proporciones comunes.
Las tradiciones Mayas hacen referencia a que poseían conocimientos astronómicos, que fueron dados por seres superiores de los que decían que eran dioses, que llegaron de los cielos a instruirlos. Narran en sus historias que alrededor del año 3.100 a.C, llegó a ellos un dios llamado Kukulcán por los mayas y Quetzalcoatl por los aztecas.
Se identificaba en ambas culturas como la serpiente emplumada y es el supuesto creador de Teotihuacán. Este dios, era el más importante y cuentan que provenía de un país extranjero del Sol naciente. Convivió entre ellos 52 años, en los cuales recibieron toda clase de enseñanzas y sabiduría.
Cuando Quetzalcóatl cumplió su misión, se retiró hacia el mar y allí embarcó en una nave. A lo largo de 900 años, los mayas edificaron Teotihuacán o ciudad de los dioses, donde dibujaron un gigantesco mapa del sistema solar. ¿Cómo sabían ellos, sin la tecnología actual, exactamente cómo se conformaba el sistema solar?
Perú, Guatemala, Ecuador, China, la India, son algunos de los lugares en nuestro mundo que parecen haber tenido algún tipo de conexión en el pasado, compartiendo culturas y conocimientos muy similares, ¿producto de «agentes externos a nuestro planeta»?
La única certeza que tenemos hoy es que es difícil pensar que dos o más civilizaciones antiguas, que nunca se cruzaron entre sí, que nunca supieron de la existencia una de la otra, tengan tantas similitudes entre civilizaciones antiguas y que por suerte, todas las dejaron grabadas, de una forma u otra, para que nosotros hoy las investiguemos y confirmemos que nunca estuvimos solos.
La interconexión de conocimientos en civilizaciones antiguas
Al examinar más a fondo las similitudes entre civilizaciones antiguas, nos encontramos con patrones de conocimiento compartido que abarcan desde la arquitectura hasta la astronomía y la mitología. Estas similitudes transcienden las barreras geográficas y sugieren un hilo conductor en el desarrollo humano que aún estamos intentando comprender plenamente.