Advertencia de horror de crisis alimentaria: escasez global para ‘matar a millones’ con brote de la era victoriana

La invasión de Rusia a Ucrania ha provocado una crisis alimentaria mundial con millones de personas que se enfrentan al hambre desde que ambos países, dos importantes exportadores de trigo, detuvieron las exportaciones. Ahora, el jefe de una importante organización de ayuda ha advertido que la crisis alimentaria mundial provocada por la guerra en Ucrania matará a millones al dejar a los más hambrientos más vulnerables a enfermedades infecciosas como la tuberculosis, lo que podría desencadenar un nuevo brote catastrófico.
Desde el comienzo de la invasión, Rusia impuso un bloqueo naval a los puertos ucranianos del Mar Negro, cortando los envíos de granos del cuarto exportador mundial de trigo y maíz al resto del mundo.
Los países occidentales han acusado a Rusia de tratar de mantener como rehén el suministro mundial de alimentos para ganar influencia en la guerra.
Peter Sands, director ejecutivo del Fondo Mundial de Lucha contra el Sida, la Tuberculosis y la Malaria, dijo a la AFP que millones morirán no solo por el hambre provocada por esta crisis, sino también por tener defensas más débiles contra enfermedades infecciosas debido a la mala alimentación.
En una entrevista en la cumbre de ministros de salud del G20, Sands dijo: «Creo que probablemente ya hemos comenzado nuestra próxima crisis de salud.
“No es un patógeno nuevo, pero significa que las personas mal alimentadas serán más vulnerables a las enfermedades existentes.
«Creo que el impacto combinado de las enfermedades infecciosas y la escasez de alimentos y la crisis energética… podemos estar hablando de millones de muertes adicionales debido a esto».
El experto en salud advirtió un resurgimiento de la tuberculosis (TB), que asoló Gran Bretaña a fines del siglo XIX y principios del XX, y continúa propagándose en muchas partes del mundo en la actualidad.
Sands dijo: «Ha sido un desastre para la tuberculosis.
«En 2020, vio a 1,5 millones de personas menos en todo el mundo recibiendo tratamiento por tuberculosis y, trágicamente, eso significa que varios cientos de miles de personas morirán, pero también que esas personas infectarán a otras personas».
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